Este blog tiene este nombre, porque la persona, que me enseñó los primeros pasos en el patchwork, solía hacer tres nudos en el extremo del hilo de la aguja, siempre que comenzaba una labor.
Cuando le pregunté por qué, me explicó:
-Anudar es la forma más sencilla de unir algo con fuerza, por eso, unos simples nudos, van a hacer que ésto, que estoy empezando,
perdure en el tiempo,refuerce el comienzo de este trabajo para que no lo abandones y te ayude a finalizarlo sin contratiempos.
De esta manera, y ya desde el comienzo, averigüé,que detrás de algo tan sencillo, como era unir trozos de tela, se encontraba todo un mundo lleno de magia que cada día voy descubriendo.
Con el tiempo también se ha creado un grupo de mujeres, en donde todas estamos a la misma distancia, donde todas “nos vemos” y nos reconocemos, donde compartimos,donde sentimos una vinculación
afectiva que ha generado algo especial que nos llevó a establecer una
amistad.
Por eso quiero compartir con todas ustedes este poema Cuando las cabezas de las Mujeres se juntan alrededor "del fuego", de la autora Simone Seija Paseyro
Alguien me dijo que no es casual…que desde siempre las elegimos.
Que las encontramos en el camino de la vida,
Que las encontramos en el camino de la vida,
nos reconocemos
y sabemos que en algún lugar de la historia de los mundos fuimos del mismo clan.
Pasan las décadas y al volver a recorrer los ríos esos cauces,
Pasan las décadas y al volver a recorrer los ríos esos cauces,
tengo muy presente las cualidades que las trajeron a mi tierra personal.
Valientes, reidoras y con labia.
Valientes, reidoras y con labia.
Capaces de pasar horas enteras escuchando, muriéndose de risa, consolando.
Arquitectas de sueños, hacedoras de planes,
ingenieras de la cocina, cantautoras de canciones de cuna.
Cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor de “un fuego”,
nacen fuerzas, crecen magias, arden brasas,
que gozan, festejan, curan, recomponen, inventan,
crean, unen, desunen, entierran, dan vida,
rezongan, se conduelen.
Ese fuego ha sido nuestras tardes de costuras...
Porque cuando las cabezas de las mujeres se juntan
alrededor “del fuego” que deciden avivar con su presencia,
hay fiesta, hay aquelarre, misterio, tormenta, centellas y armonía.
Aquí he encontrado verdaderas amigas y como diría Paqui: - ¿Dónde estaban ustedes cuando yo estaba deprimida?